NOTA PUBLICADA EN   LA  EDICION Nº   356 DE “LA CIUDAD”   DEL  SABADO 30 DE AGOSTO DE 2003)

*Se llama OLGA MERA VDA. DE PUCHI  * Pese a sus 84 años aún mantiene viva su elegancia *Chubutense de origen , en 1946 llegó a nuestra ciudad para radicarse definitivamente *

“No fui muy amante de los bailongos”

-“….Yo nací en Sánchez, Sarmiento ,  Chubut y hoy ese pueblo se llama Facundo. Yo vivía ahí  con mis padres . Antes de llegar a  Las Heras pegué muchas vueltas, lo que pasó fue que en el año ’21 nos fuimos de Chubut con mis padres para Chile, a Coyhaique, en un lugar que se  llama “El Salto” , porque había una  huelga y mucha gente se fue a internar a Chile. Mi padre ya había sido viudo anteriormente , tenía cuatro hijos con la primer señora y  con mi mamá  tenía dos y una fallecida. Cuando llegamos a Chile, mi papá realizó una especie de campito , hizo su casita y nosotros eramos todos chicos y mientras tanto vivíamos con los abuelos de parte de mamá. En ese mismo año falleció mi madre y ahí volvimos a quedar sólos y mi padre se volvió a casar con una señora que se llamaba Juana Fuentes, entonces nos fuimos a vivir  al campo que tenía y dejamos a los abuelos que nos estaban criando  en ese entonces.  Allí nos hicimos grandes y después nos  casamos, cada uno formó su familia, primero se casaron las mayores y una de las últimas fui yo, una de las menores porque tenía 17 años cuando me casé con Rosamel Puchi , él tenía campos , se dedicaba a la hacienda y yo era ama de casa. Más tarde, cuando las chicas fueron grandes nos fuimos para el pueblo con ellas y mi marido venía cada siete-ocho días a traernos las cosas que necesitábamos, pero él atendía su campo. “

-“…..Después de muchos  años cuando mis hijas fueron grandes yo tuve aspiraciones de volver a mi país,  siempre pensaba ‘algún día voy a llegar a mi país ,,,’, pero en esos años era muy crítico el asunto de  que el marido le iba a decir a la mujer , ‘Sí, andate a tu país …’ , ahí mandaban los maridos, era como respetar al rey , porque los maridos de antes eran así, ellos se hacían valer por sus propios medios, como que el hombre únicamente tenía derecho a mandar y la mujer a los platos, las cacerolas y los hijos… (risas)  . Igual vinimos todos para acá, cuando yo tenía 27 años en el año ’46  llegamos a  Las Heras , en el mes de Septiembre , pero después mi marido hizo un viaje a Coyhaique y no regresó y cuando volvió llegó muy enfermo y vino a morir acá …“ .

-“… Cuando yo estaba sola con mis hijas trabajé  con el Dr. Antonelli   y  así me ganaba unos pesitos para darle de comer a  mis hijas. Después de eso, estaban anotando gente para el Hospital , que en ese entonces era una sala de primeros auxilios que  es el colegio que hay ahora frente a la comisaría .   Y  había un oficial de policía que me dio una mano muy grande y me presentó a mi para que me llamaran de cualquier trabajo y al poquito tiempo me llamaron para trabajar como mucama y debía desempeñar el trabajo de lavado y planchado. Y así pasaron dos o tres años , hasta que vino  un Dr. Enrique García de  Perito Moreno y me llamó y me dijo si no aceptaría otro puesto mejor que el de mucama y le dije que sí, pero siempre que lo pueda desempeñar . Yo no sabía nada más que poner una inyección y me dijo : ‘de ahora en adelante usted va a seguir como ayudante de enfermera , bajo la orden mía ‘   , hasta que me dieron el nombramiento y seguí 19 años trabajando en el Hospital. Después me llegó un traslado a Río Gallegos y no lo pude cumplimentar  porque tenía a mis hijas que estaban en el colegio de las Monjas en Puerto Deseado y yo nunca quise separarme de mis hijas, siempre quise estar cerca de ellas, así es que  nunca acepté el traslado. Y debido a eso, las cosas ya no empezaron a andar bien y pedí el retiro, pasó poco tiempo y había un Sr. Moreno acá en Vialidad Provincial y un día vino a hablar conmigo y me dijo:  ‘Olga, usted no quisiera aceptar un puesto en una pequeña sala de primeros auxilios que tenemos …?’   Y le dije que   sí, entonces me anotó porque había  muchas personas que querían entrar, pero la que salía era nombrada de Río Gallegos.  Así fue que el puesto vino para mi, estuve cinco años , pero renuncié porque las cosas ya no andaban muy bien, había mucha vigilancia, mucha cosas raras  y no me gustaba el ambiente, entonces para evitar problemas me hice a un lado y listo. Así que después me computaron esos 5 años, más los 19 del Hospital, pero me costó un triunfo para la jubilación, hicimos tantos trámites que ya no sabía adonde apelar para jubilarme. Entonces vino mi yerno que estaba en Deseado, él me ayudó y finalmente no sabemos que enriedo de papeles hubo que me jubilaron por la nación, nada que ver con mi trabajo porque siempre trabajé para la provincia” .

-“…Acá en  Las Heras  también tuve  otra pareja, Domingo Perales, pero no tuvimos hijos porque yo no quería, estuvimos 27 años y  él falleció de un ataque y de ahí se terminaron las relaciones amorosas” .

-“…Y ahora no vivo para nadie, porque no tengo a mis hijas, cada una hace su vida, yo vivo prácticamente sola en esta casa, tengo un pensionista que me alquila una pieza y con eso que él me paga y el sueldito miserable que tengo de jubilación , vivo. Nadie me pide nada , a nadie le doy nada y con eso me alcanza …”

-“…Y esta casita es mía y no es mía …, las dos cosas , porque todavía no puedo conseguir el titulo de  propiedad, pero todo está pagado. Esta casa fue de un Sr. Emilio Méndez, que falleció en el Hospital, un galleguito que estaba sólo, se enfermó y justamente murió en mi guardia. Yo le alquilaba a él dos piezas acá y también vivía otra familia que era  Doña Rosalía Vda. De Pereyra, ella era modista. Y resulta que cuando él falleció esto quedó medio en el aire, hubo una ahijada que decía que tenía derecho pero en el Juzgado no se lo hiceron valer, así es que por intermedio del Juez que era Don Ventura  Ramos, me pusieron como tutora judicial y de ahí empezamos a hacer trámites para ver si yo me podía quedar con esto y sigo con la esperanza  de que algún día me den el título de propiedad, porque pagar ya pagué todo  y todo está bajo documento, así que puede ser que me lo den antes de que me muera … “ .

-”…Antes cuando andaba bien siempre tenía pensionistas, pero en ese interín que le hacía la comida a la gente me empecé a enfermar de la pierna y ahora casi ya no camino . Nunca me agradó mucho el baile, en las fiestas fuera de casa anduve muy pocas veces, no fui muy amante de los bailongos, fui una mujer si se quiere bastante conducida porque nosotros nos criamos con la madrastra y no es lo mismo que tener una mamá, porque hay cambios. A pesar de que la madrastra fue una mujer muy buena, porque eramos varios huérfanos de madre y nunca nos puso una mano encima  y ‘cuantas veces hubiéramos merecido un cachetazo’ .., pero  nunca nos pegó …!!!!”

-“… A mi me encantan las plantas , lo que pasa es que ahora no puedo atenderlas pero el muchacho que está acá Oscar Aguilera , es un hombre chileno que hace años que está acá, él me alquila una pieza  que tengo atrás. Oscar riega las plantas , les pone abono, cuida las gallinas que  yo ya no puedo atender, hace las compras, me ayuda mucho , él trabaja en Bolland y ya deben hacer como 20 años que está acá,  es uno más de la familia , una persona muy buena . Es más, está tan adaptado acá que todos creen que es mi marido y no es mi marido…, no es nada, él alquila acá , come conmigo, yo le doy la  comida y él me paga “ .

-“… Antes me levantaba temprano , ahora ya no porque ando muy enferma, aunque no se me nota, tuve un ataque porque soy diabética y me quedé con mareos en la cabeza, hay días que me levanto mareada y me tengo que andar agarrando para no caerme, camino muy poco, los médicos dicen que debiera caminar pero no puedo. Ahora ya no salgo afuera porque ando mal de las piernas, me he caído varias veces, además tengo Parkinson del lado derecho, me tiemblan la pierna y el brazo y tomo muchos remedios , para los mareos, para el Parkinson, para la presión y ahora también para los dolores.”

-“… Yo le digo a Oscar que ya no sirvo para nada, pero como puedo le hago la comida, porque lleva vianda para el trabajo , pero todo lo que hago es a fuerza de sacrificio” .

-“…Mi hija Esther viene siempre, pero a veces anda tan mal que no la puedo escuchar como se queja, porque yo no la puedo mejorar, qué le puedo hacer yo si no le hacen nada los médicos!!! , porque hay días que anda muy mal , tiene muchos dolores en los huesos, a veces no puede ni levantar los brazos. Y Olga viene muy poco y cuando viene está apurada por volver, porque ella está acostumbrada  con sus nietas, que no quieren que venga. Otra compañía que tengo son estas dos mascotas, el gato y el perro, que los tengo tan mimosos, que se ponen celosos  cuando viene alguien”.

-“…Toda  la vida me gustó andar bien arreglada, siempre me pinté y mis hijas fueron iguales, yo me levanto, me lavo la cara, preparo mi mate y me arreglo, porque algunas se arreglan para salir, pero yo no” .

– “…A  Las Heras la quiero mucho, aunque esté cambiada por tanta gente que vino, hay mucha gente desconocida y algunas cosas que pasan de vez en cuando que no debieran pasar, antes era todo más  tranquilo pero igual quiero a este pueblo, quiero morir acá …” .