(NOTA PUBLICADA EN LA EDICION  N° 354  DEL 10 DE AGOSTO DE 2003  DE REVISTA “LA CIUDAD”)

DON RAUL MOYES TIENE 82 AÑOS . DOÑA FLUGENCIA LOPEZ  TIENE 78 . SON ORIUNDOS DE  PUERTO SAN JULIAN PERO DESPUÉS DE CASI UNA VIDA EN  EL CAMPO, ELIGIERON ESTE LUGAR PARA CRIAR A SUS HIJOS . 

“LA VERDAD ES QUE  SE  EXTRAÑA  EL CAMPO”

RAUL :  “Yo nací en San Julián, somos solo dos hermanos, mi   mamá se llamaba Antonia y mi padre Agustín, él se dedicaba a la ganadería, era  dueño de la Estancia  “SAN AGUSTIN”   que queda por la zona de   Caracoles. Yo estuve estudiando en el Colegio Salesiano , hice hasta cuarto año, en ese tiempo yo era muy joven, así que mi papá  no quería que ande a caballo, entonces me contrató de vendedor ambulante Don Antonio Poturica, anduve  dos años con él . Y más tarde estuve de encargado de algunas estancias, como la estancia “San Carlos” por cuatro años, también de la  estancia “Kaike Sur” durante dos años y después ya nos vinimos a la estancia de nosotros.   Resulta que  mi papá era socio con dos personas más y repartieron los campos, así que nosotros  nos hicimos cargo de lo que le tocó a mi  papá y mi hermana se fue a Buenos Aires, porque allá compramos una casa con lo que ganábamos de la estancia , en esos años se trabajaba muy bien, además le compramos esta casa a los dueños del “Asturias”, acá también vivieron Tito y Héctor . “

FLUGENCIA :  “Nosotros eramos cuatro hermanos y ahora quedamos dos, yo y  mi hermano que está en  Gregores, lo  deben conocer porque ha venido a reemplazar al Juez de  Paz . Yo en realidad me tendría que llamar Fulgencia, pero  mi papá  cuando fue a anotar mi nombre  me puso Flugencia,  je,je,  son cosas de la vida … Y con Raúl  nos conocimos allá en San Julián , de jovencitos, si cuando nos casamos  yo tenía 20 años y él tenía 24 , nos casamos el 28 de Abril de 1945 . Los dos hijos varones que tenemos nacieron en San Julián y la hija en Gregores . “

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RAUL :  “ Y después que pasó lo del Volcán más o menos en el ’91 nos vinimos del todo para el pueblo porque antes sabíamos venir de vez en cuando y esta vez fue definitivo. Pero extrañamos tanto el campo, antes que pase eso teníamos unos 2500 animales  y después de las cenizas  quedaron poquitos , así que los vendimos. Al poco tiempo que nos vinimos para el pueblo alquilamos la despensa “Santa Rosa” de Barrientos, trabajábamos con  Irma y Tito , la tuvimos un año porque nos quisieron aumentar el  alquiler. Así que después nos vinimos para la  casa y Tito puso una despensa en el salón de adelante, pero cuando se fue a trabajar al campo la cerramos. Más tarde empecé a trabajar  de fletero, acarreaba bloques con la 350 que traje del campo, estuve varios años con eso,  pero   cuando el Doctor me dijo que ya no  podía hacer fuerza, dejé de trabajar . “

FLUGENCIA :  “Y  la 350 se la vendimos a Lujea , la tuvimos unos cuantos años a esa camioneta, se extraña, pero cuando andamos por donde Lujea   la pasamos a ver, la tiene en el patio de la casa. Y la camioneta que tenemos ahora  que está en el galpón la ganamos en el año ‘88 en un sorteo del Plan País y hasta ahora anda bastante bien “.

RAUL :  “ Y yo como estaba acostumbrado a  levantarme temprano en el campo, acá  me levanto  a  las siete, me tomos unos mates y después le preparo el desayuno   a  la vieja. Los fines de semana cuando me levanto veo a los chicos que vuelven del baile borrachos, se toman unos tragos y después pasan las macanas o los autos que pasan a toda velocidad y hacen un bochinche bárbaro. Pero antes eso no pasaba, para mi es porque se sacó el servicio militar, antes había más respeto. Yo me acuerdo que en la milicia estuve 15 meses en  Esquel y  nunca estuve preso, a mi me dijeron que cuando vaya a la milicia tenía que decir que no sabía hacer nada, para no meter la pata. Y de repente salió  en  la orden del día  :  “Soldado Moyes, ayudante de enfermero” y  yo le dije “Permiso mi  Capitán, no me gusta ese trabajo” y  me dijo : “Ya se va a acostumbrar  muchachito .” …  Y después había que ver   las inyecciones que puse en el campo, tenía buena mano. Y   todo eso te sirve para hacerte más hombre” .

FLUGENCIA :  “ Yo me levanto a las nueve, no tan temprano como él y por la tarde dormimos la siesta. Así que no los veo tanto a los chicos cuando pasan, pero sé que antes se le tenía más respeto a la policía sobre todo y ahora no respetan a nadie. “

RAUL :  “Me gusta mucho atender a las gallinas y el gallo, pero ponen muy poco y los huevos se los doy a los hijos o  a los nietos. Y de lunes a viernes vamos al centro de jubilados a retirar el almuerzo, cuando está el tiempo bueno vamos los dos , pero si está feo voy solo. El sábado comemos acá y el domingo vamos a la casa del hijo  a  comer.  Los hijos y los  nietos  siempre nos visitan y el que también siempre nos viene a ver es Don Ruiz, un señor que conocimos en el campo porque es albañil y estuvo mucho tiempo trabajando en una estancia que queda al lado de la nuestra “.

Raúl y Flugencia. Tienen tres hijos (Inés, Ramón  y  Héctor) 7 nietos y 3 bisnietos. Forman una familia tradicional de Las Heras  y son muy apreciados por  su bondad y  sus dotes de buena gente .

FLUGENCIA:  “La  verdad es que se extraña el campo ,  pero a la estancia hemos ido varias veces y los hijos siempre van, también el que sabe ir es Pachano. La estancia no está tan sola, porque desde hace un tiempo están trabajando los mineros , así que van para allá. “

RAUL : “ Lo que pasa es que en esa zona encontraron oro y otros minerales. Ahora le cedimos la estancia a los hijos, por si nos llega a pasar algo a nosotros, así no tenemos que hacer sucesión. Además ya le queda poco hilo al carretel, así que nos vamos a quedar acá nomás” .

FLUGENCIA:  “Yo casi  ni camino, antes en el  campo caminaba leguas y leguas, pero desde que me operé de la cadera no quedé bien, así que se me hinchan mucho las piernas, pero estoy tomando unas pastillas y estoy mejorando. Pero qué le  vamos a hacer, así es la vida, ya nos queda poco” .

NOTA DE LA R :   Doña Flugencia falleciò primero y unos años màs tarde Don Raùl  perdiò la vida en circunstancias que en su momento publicamos  pero   que para esta revista no quedaron  claras  y que lamentablemente nos causò ademàs del dolor por su pèrdida una gran sensaciòn de injusticia por causas que nos reservamos  de comentar en este momento porque el sentido de esta nota es sencillamente recordarlos tales como eran .   DIOS LOS TENGA EN LA GLORIA,   DON RAUL Y DOÑA FLUGENCIA !!!!

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